Sobre Nosotros

Nuestra historia

Cuando se cree firmemente que una institución educacional debe otorgar un servicio social y de amor a las nuevas generaciones, se establece entonces la necesidad de concebir un plantel que reúna las características deseables y más apropiadas para que los y las estudiantes puedan alcanzar un desarrollo personal en óptimas condiciones.

En sintonía con esta línea de pensamiento, crear The Kingstown School fue un anhelo hecho realidad. Una pequeña ciudad donde se forjaran hombres y mujeres, personas íntegras, ciudadanos/as del futuro y capital humano de calidad.

Dado los requerimientos propios que demanda implementar la Jornada Escolar Completa, las profesoras fundadoras, María Graciela Pérez San Martín y Raquel Guerrero Ovalle, al momento de adquirir el terreno el 12 de enero de 1998, privilegiaron el espacio físico para brindar confort y armonía a las diversas áreas en las que se desarrollaría el trabajo pedagógico. El 1 de octubre de 2001, se dan inicio a los trabajos de construcción del futuro plantel educacional. Allí se plasmarían, en diferentes materiales, los planos soñados para cada rincón de esta inmensa infraestructura.

El Ministerio de Educación, valorando la presencia importante de este plantel en el sector de Bosques de Santa Julia, otorga el reconocimiento oficial como entidad cooperadora de la Función del Estado el 21 de Febrero de 2003, según consta en la Res. Ex. N° 6006/2003.

El 28 de Febrero del 2003, las fundadoras observan con satisfacción la construcción de esta gran obra culminada en su totalidad. Al recorrer cada una de sus dependencias, aprecian con orgullo la concreción de sus sueños.

Muchos rostros pequeños y curiosos se asomaron por primera vez en las relucientes aulas el 1 de marzo del 2003, día en el que se iniciaron oficialmente las actividades académicas. Las primeras fundadoras ya conocían su reino.

Izquierda Raquel del Carmen Guerrero Ovalle, derecha María Graciela Pérez San Martín

Fundadoras (A la izquierda Raquel del Carmen Guerrero Ovalle, a la derecha María Graciela Pérez San Martín)

Nuestro establecimiento educacional fundamenta su quehacer pedagógico en una concepción del mundo que considera al hombre como un ser dotado de espiritualidad y, por consiguiente, un ser trascendente que necesita desplegar sus potencialidades, reformular permanentemente su proyecto de vida y desarrollar su vocación.

Desde este punto de vista, The Kingstown School, promueve el desarrollo integral de los/as niños/as y del adolescente, creando los espacios, generando los recursos y diseñando las instancias de diálogo, de sana convivencia social, de trabajo en equipo de respeto y amor -principalmente al prójimo, a la verdad, a la justicia, y a la belleza- de compartir con solidaridad y generosidad. Estos conceptos, forman parte de los objetivos de aprendizaje transversales que trasponen el currículo en todas sus áreas y sectores de aprendizaje que están contenidas en nuestro Proyecto Educativo.

Misión

Entregar un proceso educativo inclusivo e integrador proporcionando a sus estudiantes un ambiente armonioso que les permita aprender a conocer- hacer, incorporando innovaciones metodológicas a través del perfeccionamiento continuo de sus docentes; para formar personas con un desarrollo integral, capaces de comprometerse consigo mismo y con los demás

Visión

La comunidad educativa The Kingstown School busca ser reconocida a nivel comunal y regional en aspectos académicos,formativos, valóricos, artístico- culturales y deportivos, generando un espacio armónico para formar personas que sean agentes de cambio con compromiso social y sólidos valores, capaces de comunicarse en el idioma inglés, a través del arte y la música y de incidir positivamente en su entorno.

Extracto proyecto educacional

  • La educación humaniza y personaliza al ser humano cuando logra que éste desarrolle plenamente su pensamiento y su libertad, haciéndolo fructificar de modo que sea capaz de generar cambios con compromiso social en su entorno, produciendo cultura, transformando la sociedad y construyendo la historia.
  • Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos. Todo hombre y mujer, por ser persona, tiene derecho inalienable a la educación, a una educación acomodada a la cultura y las tradiciones patrias.
  • Nuestra comunidad, dado su carácter, acoge con sentido ecuménico todas las expresiones de fe que adopten los hombres y mujeres de buena voluntad.
  • Los altos ideales de la educación cristiana que se encuentran presentes en el equipo de gestión directiva de la sociedad sostenedora del establecimiento, tienen por último fin otorgar una educación científica-humanista, cultural y moral de calidad a las futuras generaciones que egresen de nuestra institución, en una dimensión del ser y del quehacer humano, dotado de espiritualidad y trascendencia constituyendo el fundamento de nuestro proyecto educativo.